Segunda y última parte de éste magnífico tutorial de mezcla, ecualización y trucos finales que completan un necesario recurso, muchas veces menospreciado o simplemente, desconocido.
IMPORTANTE
En caso de que no tengas disposición para aprender, deja de leer. La cultura del todo hecho sin esfuerzo no crea mejores DJs, en todo caso, sólo hace productos que aparecen igual de rápido que desaparecen, no existen los atajos ni los caminos cortos.
Paso a paso, avanzando firme y seguro. Es exactamente a lo que te invitamos. En sonido, a pesar de que parece todo muy simple, en la realidad no lo es tanto. Quizás no quieres aprender técnicas ni leer, mucho menos digerir y depurar el conocimiento, simplemente quieres sonar cómo tál o cuál… te vamos a pinchar un globo: ellos no suenan así, lo hacen sonar así para ellos.
LA REALIMENTACIÓN (o retroalimentación)
La realimentación es ese desagradable y desconcertante efecto que se produce cuando una frecuencia se capta por un micrófono, resuena y se produce un bucle infinito. Es muy complejo y tiene muchas variables, como son el tipo de micrófono, el volumen del escenario, la acústica, etc…
Los problemas de realimentación en el sistema de sonido principal se multiplican cuando tienes que tratar con muchas mezclas en el sistema de monitores y la proximidad de los micrófonos con los monitores.
ECUALIZADORES GRÁFICOS
El método más común de eliminar la realimentación es el uso del ecualizador gráfico. Cuando una banda de frecuencias especifica comienza a realimentarse, ese nivel de frecuencia se puede reducir atenuando correctamente la banda en el ecualizador gráfico. El formato común para los ecualizadores gráficos es diez bandas {aproximadamente una octava por banda}, quince bandas {media octava por banda} y treinta bandas {un tercio de octava}. Cuantas más bandas tenga el ecualizador, más estrecho es el rango de frecuencias que se puede ajustar y por tanto más efectiva es la ecualización.
Uno de los mayores problemas con los ecualizadores gráficos es que no solo alteran la frecuencia en cuestión sino también las adyacentes. Esto es más notable sobre todo con
ecualizadores de pocas bandas, por lo tanto el consejo es evitar la tentación de ecualizar en exceso. A menudo, el técnico de monitores reducirá una frecuencia cuando aparezca la realimentación, subirá el nivel hasta que la siguiente banda se realimente, la reducirá, y así sucesivamente. Lo que consigues al final es una reducción de muchas frecuencias, bajando el nivel general.
Excederse en la ecualización puede significar una alteración en el balance tonal, especialmente cuando hay pocas bandas para modificar en el ecualizador. En el uso de un ecualizador gráfico, la máxima atenuación o realce será de unos 12 o 15 dB por banda. Pero, a menudo esto no es suficiente para solventar un problema de frecuencias. Muchas veces se necesitan niveles de 20 o 30 dB para eliminar ese problema.
Un método más eficiente para filtrar la realimentación es usar un filtro de picos multibanda que cubra un amplio rango de frecuencias. Esta potente herramienta contra la realimentación se incorpora en la mayoría de los sistemas modernos de monitores. Con este tipo de filtro, simplemente hay que escuchar la realimentación, determinar su frecuencia (normalmente de 1 a 2 kHz). Una vez que se ha encontrado dicha banda, se ajusta con el control notch depth (profundidad de pico) y se mueve el potenciómetro frequency sweep (barrido de frecuencias) hasta eliminar la realimentación.
Una vez que se han resuelto los problemas con la realimentación, se puede usar el ecualizador gráfico, llevando a cabo un ligero ajuste para compensar el tono. Úsalo para modificar el sonido de una forma racional, no para luchar contra la realimentación.
UNOS TRUCOS FINALES
- La amortiguación siempre es una gran ayuda. Si el escenario es especialmente grande, usa materiales absorbentes como paneles de tela, paneles acústicos aislantes o corcho artificial. Si bien estas técnicas son muy usadas en estudios no las deseches en vivo.
- Enmudece todos los micrófonos que no se usen. Esto se puede hacer con el switch mute en la mesa de mezclas, pero requiere estar pendiente constantemente de todos los micrófonos. Otro método sencillo es utilizar puertas de ruido (Gates) que anulen un micrófono cuando no se usa.
- Aunque pueda parecer extraño una de las mejores formas de anular la posibilidad de realimentación en un sistema de monitores es invertir la polaridad de la salida de monitores en la mesa de mezclas. Al contrario que con la mezcla principal donde es necesario mantener una relación de fase constante para prevenir una cancelación de señal, los monitores son independientes y no requieren esta consistencia. Por otra parte, la polaridad tiene mucho que ver cuando se produce la realimentación. Cambiar la polaridad en uno de los monitores puede significar un incremento de ganancia antes de que se produzca la realimentación.
- Por último algo muy importante que todo técnico debe poseer es algo de psicólogo y convicción fuerte en su postura para dar seguridad. Nunca te dejes llevar por las discusiones entre los miembros de la banda. El mayor problema de un grupo es el ego interno. Las guerras de volúmenes pueden arruinar una mezcla en un momento. Los niveles de escenario deben estar siempre bajo control. Un volumen excesivo (o cambios aleatorios en el volumen) hará imposible la mezcla de monitores. Cuanto más empeño pongas en mantener los niveles del escenario dentro de un margen controlable, mejor será el sonido que consigas.